La enfermedad - Patrick Kelly

A menudo la gente se pregunta si deberían seguir practicando mientras están enfermos. Personalmente siempre he continuado entrenando y así lo hicieron mis profesores.

Recuperación más rápida:

Investigaciones muestran claramente que el sistema inmune es potenciado durante y después de la práctica de Tai chi, mientras que se deprime durante y después del ejercicio físico intenso cómo running, gimnasio o artes marciales externas. Así que, continuar practicando Tai chi es la manera más rápida de recuperarse.

Preocupación por resultar infeccioso

Resfriados, gripes y similares es justo en los días previos a la aparición de los síntomas obvios cuando resultan más infecciosos, por lo que es demasiado tarde para preocuparse sobre contagiar a otros cuando los sientes más fuertemente. También porque has contactado con otros cuando su sistema inmune estaba en un estado elevado la probabilidad de que se contagien se reduce mucho. Puede incluso inducir una respuesta inmune que les ofrezca una protección cuando se encuentren en una condición más vulnerable.

Mente Profunda interna vs Mente Superficial externa

La Mente Profunda recibe un beneficio de la practica sin importar el estado del cuerpo físico por lo que te empuja a continuar.

La Mente Superficial es una parte del cuerpo (consciencia cerebral). Tiene ideas sobre el Tai chi, pero no puede realmente apreciar el verdadero profundo valor del entrenamiento. La Mente Superficial se debilita cuando el cuerpo está enfermo y entonces pierde su voluntad de seguir practicando por un breve periodo o puede que para siempre.

En la vida, aspira a seguir a la Mente Profunda (La Mente Profunda está próxima al Dao). Por eso nosotros te recomendamos encarecidamente que continúes practicando mientras estés enfermo.

Patrick Kelly

La Fuerza Elástica (Jin) de Intercepción

Había una característica importante tanto en el Empuje de Manos del Maestro Huang como del Maestro Ma que hizo que estos dos expertos en Tai chi destacaran de todos los demás que conocí. Era la capacidad de transmitir su Tai chi-jin a lo largo de los brazos de su compañero dondequiera que fueran tocados, incluso cuando su pareja intentaba relajarse. Trabajé en esto por mi cuenta reproduciiendo el método que había observado en ellos y después de muchas falsas pistas encontré el camino que lentamente desarrolla esta habilidad. Inicialmente, yo ingenuamente creía que era sólo cuestión de coger los brazos de la pareja cuando estaban contraídos en una estructura fija, y luego transmitir una fuerza contundente de la que el compañero no tenía tiempo de retirarse. Pero esto no es más que, una vez más, mayor fuerza y mayor velocidad, el viejo distintivo de las artes externas.


Sólo cuando empecé a trabajar en el nivel de mente a mente, detectando fuerzas en lugar de movimientos y posiciones, comencé a encontrar la manera. Cuando nuestro compañero genera una intención de moverse, por un corto periodo de tiempo su cuerpo queda involucrado en generar la fuerza necesaria para ese movimiento. Aunque su cuerpo puede estar todavía relativamente relajado, durante el tiempo que los músculos requieren para cambiar hay una dirección en la que podemos descubrir una resistencia a nuestra fuerza. Sin resistencia, no se desarrolla la presión, y sin presión (eléctricamente equivalente al voltaje) la energía no fluye. Pero primero debe haber una ligera retirada que permite que el movimiento pretendido de la pareja caiga en un vacío. Cuando la mente de nuestra pareja experimenta este vacío inmediatamente invierte su intención en una reacción subconsciente. Mientras intenta no excederse y evita caer en el "agujero" percibido, casi inevitablemente el compañero aumentará la tensión en sus brazos, buscando apoyo. Esto es lo que hemos estado esperando y hundiéndonos para dirigir esta fuerza de sus brazos al suelo formamos la conexión a través de la cual nuestra fuerza elástica de Tai chi (Tai chi-jin) puede emitir; todo esto sucede en un instante. Esta "recopilación de técnicas" gradualmente condujo a, y ha sido reemplazado ahora por, mi sutil escucha del ciclo muscular de la pareja, quedando entonces el funcionamiento instintivo de su cuerpo bajo la influencia de mi profunda intención, mientras deja de responder a su mente superficial. Esto recuerda un viejo dicho del Tai chi: "Externamente fácil pero internamente difícil”, que el Maestro Huang modificó a: "Externamente difícil pero internamente casi imposible!".


Párrafo extraído del libro INFINITE DAO de Patrick A. Kelly